Ser diseñador web acarrea muchas responsabilidades, que quizás no todos conozcan. Al diseñar una página web para un negocio no sólo se debe tener en cuenta la estética de ésta, sino que entran en juego muchos otros factores que la convertirán en una buena o mala página web.

Temas como el SEO o la usabilidad del usuario, deben tenerse muy en cuenta si eres un diseñador web. De poco sirve que la página web sea visualmente espectacular si se hace muy difícil el navegar por ella. Al igual que de poco sirve tener una página web si Google no la encuentra, es decir no la posiciona donde queremos que esté.

Por eso hoy, no queremos hablaros de cómo hacer una página web más atractiva, sino de aquellos errores que se cometen más habitualmente al diseñar una página web.

Cuando errar no es de sabios. 5 errores que un diseñador web no se puede permitir

Son muchos los errores que un diseñador web puede cometer a la hora de crear una página web. Vamos a repasar en este post cuáles son los más habituales, para que intentes no caer en ellos.

Diseños webs sobrecargados. Atrás quedaron esos dancing babies que tan divertidos nos parecían en los 90, así que como siempre se ha dicho, menos es más. Si eres principiante y estás diseñando tu primera página web seguramente caigas en este error y pienses que cuantas más cosas pongas más “guay” será. Al contrario, una web profesional debe dejar claro el mensaje que quiere transmitir de manera clara y precisa, sin florituras.

  1. No poner la información del contacto de forma fácil. Parece una tontería, o algo inconcebible, pero sí señores aún existe algún que otro diseñador web que se le olvida que el objetivo principal de las webs es darse a conocer en Internet, pero de qué sirve eso si no pueden contactar con la empresa de forma rápida y fácil. Siempre debe existir una página tipo “Contáctenos” en el menú principal, en la que se especifique la dirección, el teléfono y el mail. Además hoy en día aún se le pueden ofrecer muchas más facilidades, como enlazar la dirección con Google maps para que el usuario pueda llegar a través de GPS, o activar la función de llamada pinchando en el teléfono si se está consultando la web desde un SmartPhone.
  2. No habilitar un buscador. Este punto está relacionado con lo que te comentábamos antes de la navegabilidad y usabilidad del usuario por la web. Hay que ponerle las cosas fáciles a los usuarios que visitan tu web para que encuentren lo que buscan de manera sencilla y no se vayan a buscarlo a otra parte. Así pues, disponer de un buscador interno será fundamental para que la gente se quede navegando por ella.
  3. Excederse en el uso de aplicaciones informáticas como Adobe Flash. Este punto puede crear cierta controversia, pero queremos dejarte claro que no estamos diciendo que no las utilices, sino que no abuses de ellas. A parte de su gran utilidad debes ser consciente de que puede afectar al tiempo de carga de la página web, que algunos dispositivos no puedan acceder al contenido o que este contenido será más difícil de indexar en algunos buscadores.
  4. No enlazar la web con las redes sociales de la empresa. El diseñador web, como persona que vive en pleno siglo XXI, es consciente de que las redes sociales son una herramienta fundamental para atraer tráfico a una página web. Entonces por qué hay veces en las que se olvidan de poner enlaces a las redes sociales e incluso no especificar en la página de inicio en qué redes sociales está presente la empresa. ¡Craso error!